viernes, abril 19 2024

Papeles Privados: The memory

63af497d8c5ebb4e3a73f7941ea1958d

Las golosinas aparecen tan sugerentes que la vida se parece a este momento, nos atrae, nos conquista y cada tanto nos distrae con una jugada mágica que nos perturba. Esta marea es un gran vórtice que solo podemos entender sus patrones desde una edad y captando el hilo tan delgado que separa: odio de amor, o envidia de generosidad.

¡A veces somos tan animales y en otros tan humanos! La conquista de la razón vuelve a desaparecer en este siglo que todo está sujeto a emociones dispares, ora cursis, ora sainetes, ora serias.

Hace unos días llego una imagen a mi WhatsApp, resumía el comienzo, mis ochos años. Sentado hago burlas a una prima más pequeña. Lozano, vital, inaccesible al abandono por mis padres en casa de mis dos abuelas italianas comienzo a descubrir la golosina de la vida. La fotografía se atraviesa en la creación de la Actividad del Taller de Escritura que he preparado para 30 escritores: Papeles Privados. Cruel ese misil-fotografía me recuerda que regresar al espacio de la memoria es detenerse al borde de un acantilado en el cual los momentos nos pueden dejar exhaustos.

Pero la vida siempre nos pone a prueba, ese largo fin de semana estuve en las fiestas de San Isidro y en una extensa sesión con amigos de mi hijo mayor apareció la memoria otra vez. Cada cierto tiempo llegaba en forma de invitación: “papa, me gustaría que contaras aquella vez que hiciste…”

Los territorios de la vida al atraparte pueden ser una condena o una cálida interpretación personal.

#Ud. elige, intente que sea lo segundo y su vida será esplendida.

Gracias! escritores por acompañarme en esa interpretación personal.

Notas:

Something remembered from the past.

«One of my earliest memories is of sitting on his knee» Sinonimos

recollection, remembrance, reminiscence, evocation, reminder, souvenir, echo, impression

«my memory of the events is faint»

 

 

4Comments

Add yours
  1. 3
    melbag123

    Qué hermoso, Jre. Me ha encantado. La memoria… Tenía un jefe que siempre me decía que no me fiara de ella. Entonces él tenía veintiocho años y yo veinticuatro. Buen consejo.

Deja un comentario

Facebook
Twitter
LinkedIn

Descubre más desde Masticadores

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo