“No os preocupéis por vuestros talentos y por vuestras capacidades: se desarrollarán mediante el ejercicio. Katagiri Roshi decía: Las capacidades son como una capa de agua bajo la superficie de la tierra. La capa de agua no pertenece a nadie, pero, todos pueden sacar agua de ella. Podemos alcanzarla mediante nuestros esfuerzos, y ella nos atravesará. Basta con ejercitarse escribiendo; cuando aprendemos a darle confianza a nuestra propia voz, entonces podemos dirigirla. Si queréis escribir una novela, escribidla. Si os apetece escribir ensayos o cuentos, escribidlos.
Escribiéndolos, aprenderéis cómo se hace. Podéis estar seguros de que, poco a poco, adquiriréis las técnicas y el oficio que os hacen falta”.Natalie goldberg
El talento está allí, hay que llamarle y luego sumergirse en aquello que nadie se ha atrevido a decir o enunciar. En este final de año, me sorprende, pues muchas de las felicitaciones que recibo comienzan por “gracias por haberme considerado e invitado a Masticadores” Es como si me dijeran ¡gracias por dejarme montar al carro de heno que vaga por los campos! Siempre regreso a la Golbberg cada cierto tiempo, pues ella nos habla de este momento donde cada escritor o cualquier profesional de otras áreas busca allí donde “la capa de agua no pertenece a nadie” como dice Katagiri Roshi. Y allí está el talento, allí está la inspiración para realizar grandes sueños.
En estos días preparo varios cambios en Masticadores, y surgen de mi olfato para invitar a otros a subirse al carro del heno. Mi virtud, es ver en ellos el talento y ponerlo en la vía de la comunicación. Sera salud, será viajes, será clima.
Sea lo que sea, las capas sucesivas que construyen la vida están despiertas y esperando que cualquiera las interprete y devuelva la originalidad. Acercarse al fuego primigenio, es aceptar que tu talento te guiará.
Buen comienzo de año. ¿Nos dejaremos guiar?