
El síndrome by Alejandra Verónica Gauna
Acostumbro por las noches leer algún libro lo hago entre las 22 y las 23 hs. El viernes pasado mientras leía mi mano izquierda giró
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Acostumbro por las noches leer algún libro lo hago entre las 22 y las 23 hs. El viernes pasado mientras leía mi mano izquierda giró
Temprano en la mañana bajo el sol del verano, antes que el calor sofoque, en el lugar abierto más apartado de la casa un revoltijo
Llegó, se arrodilló e introdujo la tarjeta En selección de idioma pulsó Español Apretó sobre la tecla de Retirada de Efectivo y eligió después el
Noveno día de Feria by Felicitas Rebaque Hoy se ha acercado una jovencísima pareja a nuestra caseta. Tras interesarse por algunos de los libros que
La Cirujana1.Era una noche espantosa; no había parado de llover en varios días y lascarreteras estaban intransitables. Una cortina de agua hacía muy difícil lavisibilidad
Imagen tomada de Pinterest Él no la perdía de vista. —Por favor, ¿me puede decir la hora? —la abordó con esa pregunta ¡tan pueril! que
Lucio el sol para que esté domingo día de la madre fuera luminoso como corresponde a un día tan especial. La gran afluencia de público
Imagen facilitada por la autora Esa tarde perdió las llaves, el teléfono y la esperanza. Tan simple como acercarse a dar comida a los
Son, sin duda, una excepcionalidad, una rareza, aunque no como definiría tal cosa un coleccionista sino algo que precisa de tal conjunto de circunstancias para
Compartimos las lecturas del fin de semana, que el equipo de Masticadores ha preparado. #Coachingparaesclavos #TorresCriado #Tirascómicas En Arte Francisco Bravo nos invita a visitar
16 de mayo Hay escritores que disfrutan escribiendo —o eso dicen— y otros a quienes les gusta haber escrito. Brandán deseó haber pescado desde un
Amanece tímidamente entre los pinos de aquel bosquecillo que aún se mantiene vivo junto a la playa cuando abre los ojos sintiendo junto a
La desdicha por la honra. Novelas a Marcia Leonarda. Lope de Vega Al anochecer la metí en una talega, la coloqué encima de una mula
Éranse una vez dos hadas hermanas a las que desde pequeñas se les había dicho que serían «probadas por el fuego». Nadie lo entendió entonces
A todos los que, en algún momento, han tenido que abandonar su casa. Cuando cumplí los once años, mi padre me sacó de la escuela
A diez euros y medio la hora más los materiales: ya sé lo que me va a costar que me pinten la casa. También sé
Diario: Sexto día de Feria Libro León by Felicitas Rebaque Si algo hay que destacar de esta Feria, es el gran número de visitantes que
By Neus Bonet i Sala Unos ojos brillantes tras el visillo de la ventana no paran de escudriñar arriba y abajo la plaza del pueblo.
Son las 14’30 de la tarde. Regreso a casa en una mañana desapacible que adelanta ya visos invernales. Tengo hambre y camino deprisa, hasta que
Marina abrió el sobre con ansiedad. Llevaba un mes esperando el resultado de la investigación y ahora averiguaría quién era “la otra”, esa rubia por
La 3ra re-edición (corregida por el autor) aparecerá el día 8 de mayo Fue alrededor de 2016, comencé a juntar material con base cierta para
Olvidémonos ahora de los presentes. Es evidente que nos miran con caras de estupefacción. Peor para ellos. Porque con respecto a ese automóvil somos
Crónica by Felicitas Rebaque Día muy animado, soleado favorecido por una agradable temperatura. Gran número de visitantes interesados por nuestros libros y autores, han visitado
El hombre mucho mayor que ella le cogió la cara con las manos. Sentados muy juntos en uno de los bancos, él le hacía carantoñas
Y la ninfa contempló, triste, su reflejo en el lago. La luna plateaba su cuerpo vulgar y grotesco y los grillos le cantaban
Se descolgó de la lámpara de cristal que pendía del techo de doña Pilar y se dejó caer sobre la colcha. Salomón aprovechaba su ausencia
Imagen tomada de Pinterets FRAGMENTO DEL LIBRO: EL RUMOR DEL RÍO Y EL OLOR DE LA HIGUERA Capítulo I Ella lo miró y percibió
Más se retorcía la alimaña, más se adentraba el pegamento viscoso en su pelaje. Con las patas traseras empantanadas y la colita en inerte zigzag
Salió a caminar, como era su costumbre desde que llegó a ese lugar. Esa mañana en particular le sorprendió la sonrisa de un extraño. Se
Imagen facilitada por la autora No cabe duda de que León, España, es tierra prolífica en escritores En esta ocasión presentamos a Sol Gómez Arteaga,
La sed angustiosa que sentía por esa sustancia líquida y espesa, le consumía por dentro. El deseo volvió al cuerpo del señor Martínez, en realidad
Tercer Cajón – Franco Puricelli Mientras el refrigerador está cerrado, me imagino las infinitas cosas que podría haber adentro. El aparato encierra un vasto repertorio
El viento veleidoso -dulce al olfato, enemigo de la piel- había alterado el temple citadino del visitante. Éste, dando por perdido su paquete de Marlboros