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45 TODA LA VIDA YO… By Alberto Quero

Toda la vida yo he sido inmaculado

Nada me turbaba,

nada me espantaba

y en verdes praderas acostumbraba a descansar

Lejos de mí algo que esconder,

ajena a mí era la menor tacha.

Exhibía abiertamente mi transparencia:

era capaz de resistir hasta el más atroz escrutinio,

podía enfrentar, impasible,

cualquier vivisección y cualquier pesquisa.

Me era fácil exponer públicamente

mis entrañas y mis intenciones:

nada había en mí reprensible

nada censurable ni oscuro

Yo era inmaculado, yo serenísimo, yo imperturbe,

yo el último que buscó entre las nubes

un alma que se me pudiera incrustar

en el medio del pecho,

el último que tuvo por grande cosa

un silencio pequeñito y de segunda mano

y por eso ahora no tiene nada qué decir

ni qué callar.

Yo he sido inmaculado,

y acaso lo siga siendo,

 limpio y puro como una noche fría;

ningún fuego,

ninguna iniquidad hasta mí había llegado,

ni la más leve siquiera:

la vida, constantemente,

me ha protegido de mí mismo.

  Poema incluido en: “Del azar y otras nimiedades” (2018) Ottawa, Canadá. Editorial Mapalé.

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