Subir al inicio

libres, digitales, inconformistas

libres, digitales, inconformistas

EL MUNDO DE AHÍ FUERA by Jorge Castillo

Imagen facilitada por el autor
   
El niño huyendo del mundo corrió hasta llegar a una verja que atravesó y que cerró tras de sí. Recorrió un largo camino naranja entre la crecida hierba verde hasta que llegó a la casa de tejado amarillo. Entró en la casa y vio una escalera. Por la escalera, subiendo los escalones de dos en dos llegó hasta un pasillo de moqueta roja y por el pasillo a una habitación, y se detuvo. Abrió la puerta y penetró en un cuarto de paredes rosas y cuadros blancos. Cerró la puerta con llave y se dirigió a un enorme armario marrón oscuro de nogal. Lo abrió, se metió dentro, se sentó y se encerró. Se acurrucó en su interior agarrándose las rodillas y comenzó a sentirse seguro. Cerró los ojos y los apretó fuerte fuerte y comenzó a ver, pese a la oscuridad, nítidamente el interior del armario. Con esfuerzo consiguió ver también fuera de él, con todo detalle, la habitación de paredes rosas y cuadros blancos. Atravesó la puerta en su visión y vio el pasillo de moqueta roja. Se dirigió a la escalera y raudo la descendió. Salió de la casa de tejado amarillo y, elevándose del suelo, retrocedió volando el camino naranja y pasó por encima de la verja viéndolo todo en su cabeza cada vez más nítido y más lejano.

Distinguió los tejados pardos y los distintos barrios que tenía el pueblo y luego, alrededor suyo, vio alejarse rápidamente de él toda la comarca. Vio el contorno del país tal y como lo había aprendido en los mapas y, pasando vertiginosamente por encima de las nubes, llegó hasta el espacio desde donde, con una extraña paz, contemplaba el mundo.
     

Categorias

Deja un comentario

Facebook
Twitter
LinkedIn